¡Hola a todos! Hoy vengo a hablaros de uno de los festivales más emocionantes y bellos del mundo que se celebra durante estos días: el festival de las linternas. Se trata de una celebración de origen milenario que une al pueblo asiático y congrega a miles de turistas cada año en la localidad de Pingxi, Taiwán.
Los orígenes de esta fiesta son militares, ya que el lanzamiento de las linternas en la ciudad era llevado a cabo para avisar al resto de la región de posibles invasiones y ataques hostiles. Una costumbre asociada con la guerra y la protección de un pueblo se convirtió, de a poco, en un símbolo de alegría y esperanza, hasta la actualidad donde se utilizan las lámparas flotantes se usan para pedir deseos y prosperidad a los dioses durante las bodas u otros eventos especiales, como el Año Nuevo.
Así es como en Pingxi, cada Año Nuevo, personas de todo el mundo hacen volar entre 100.000 y 200.000 linternas pintorescas, creando una de esas imágenes mágicas que a cualquiera de nosotros nos gustaría capturar con nuestra cámara o simplemente guardar en la retina para siempre.
¿Y qué más podemos hacer durante el evento? Además del famoso lanzamiento de farolillos, el Festival de Pingxi también ofrece actuaciones, exhibiciones de arte o bailes tradicionales, desfiles de carnaval, e incluso concursos de linternas que implican, sobre todo, a los más pequeños.
Gracias a su fama, el Festival de Pingxi es un acontecimiento multitudinario. Por ello, os recomiendo ser madrugadores e ir temprano para conseguir un hueco. Podéis llevar vuestra propia lámpara o comprarla en alguno de los numerosos puestos que podréis encontrar fácilmente.
Así que pensad en vuestro mejor deseo, comprad el mejor farolillo que encontréis y disfrutad de este maravilloso espectáculo de luces en el cielo. ¡Hasta la próxima!
Buen blog
ResponderEliminarEste evento lo he visto dos veces que, por desgracia, han sido en películas. Pero lo que me llama la atención es que en una de ellas este evento era, como según mencionas tú, una forma de alegría y esperanza que es lanzada al cielo como un deseo o propósito. Y la otra era como una forma de tributo hacia los dioses, que se hacía en la India. En este último habían bailes y exhibiciones y muchísima gente.
ResponderEliminarSin duda me encantaría asistir a uno en persona. Me parece emocionante y, sobretodo, precioso.
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